Desde 1966, el año en que Manolo Santana ganó el torneo, ningún español lo había vuelto a hacer.
Fue la final más larga de todo el torneo, durando así casi cinco horas y viéndose retrasada e interrumpida dos veces por la lluvia.
6-4, 6-4, 6-7, 6-7 y 9-7 fue el resultado final de otra noche mágica para el deporte español.
Enhorabuena al nuevo rey de Wimbledon.
No hay comentarios:
Publicar un comentario